• El candidato Naranja por el V distrito local se mantiene en recorridos continuos para escuchar y trabajar una agenda legislativa en conjunto.
El encuentro más importante del año se encuentra en todo su apogeo, y a una semana de contienda, el candidato por el V distrito local por Movimiento Ciudadano, Martín Vivanco, vive cada minuto intensamente repartiendo jugadas en territorio para llegar a concretar un Futuro Naranja.
Vivanco, ha mantenido una estrategia de territorio en un quinto distrito que ya conoce muy bien. “Hay que caminar, caminar, y caminar más. Hay que estar físicamente presente. Es la única manera de que tus electores te vean y, más importante, de que tú los puedas escuchar. No sólo eso: debes empaparte de las costumbres de cada región, de su microhistoria”, dijo, y, de ahí la importancia de su visita por el Mercado Gómez Palacio.
El mercado Gómez Palacio, un lugar icónico en Durango fue construido a finales del siglo XIX por el ex gobernador Francisco Gómez Palacio; en el se pueden encontrar todo tipo de productos para la vida cotidiana, desde fruta, verduras, carnes, mercería, flores, artesanías, souvenirs, comida y una gran variedad de productos para diversos usos.
“Este mercado lo hemos visitado en diversas ocasiones, sabemos que, además, es el motor económico de muchísimas familias que se sienten abandonadas por el gobierno en turno.
Se necesita mejor infraestructura, créditos con muy bajas tasas de interés, apoyos directos, subsidios para que todos los locatarios puedan competir en igualdad de circunstancias y todos los negocios puedan florecer e infraestructura para llevarlo a otro nivel” comentó Martín Vivanco.
El mercado Gómez Palacio es un lugar icónico que además coadyuva a crear comunidad, es un lugar de encuentro de todas y todos los duranguenses; además de ser un paso obligado para el turismo que nos visita.
Trabajemos por una agenda en conjunto para legislar a favor de las y los duranguenses; el México Nuevo es una invitación a dejar de cometer los errores del pasado e imaginar un futuro diferente, concluyó Martín Vivanco.